Ahora hablaremos de la Metrosexualidad, éste término en relación a los hombres metrosexuales no se refiere a una orientación sexual nueva o a una sexualidad diferente, es una propensión cada vez más generalizada que ha logrado prevalecer sobre algunos estereotipos impuestos acerca de la masculinidad.
Vamos a desarrollar la definición de metrosexualidad, el origen del término metrosexual y algunas características de los metrosexuales.
¿Y de dónde surge el término Metrosexual?
Encontramos los primeros asomos de la existencia de la metrosexualidad en el Reino Unido, cuando estrellas como David Beckham empezaron a precisar un innovador estilo de ser varón. Enseguida la publicidad y el Marketing se acometen a sacar partido de una imagen opuesta a la imagen del hombre que había sido instaurada como prototipo de la sociedad machista. Este nuevo estilo corresponde a un hombre con especial inclinación por la veneración al cuerpo, la estética y el esmero por su apariencia física.
El uso del término Metrosexual cada día se ha hecho mas común, sin embargo aún no está incluido en el diccionario de la Real Academia Española (RAE). Es una palabra nueva que proviene del homónimo anglosajón metrosexual, usado por el periodista inglés Mark Simpson en 1994, al tomar de la palabra metropolitano; el prefijo metro y lo antepone a la palabra sexual, formando el nuevo término Metrosexual para reseñar a un varón de la metrópoli urbana, cuya peculiaridad fundamental es su extremo esmero e interés por vigilar su apariencia personal, con un estilo de vida refinado y exquisito.
Según una publicación del 2002 el creador del término caracteriza al Metrosexual como aquel hombre en la plenitud de sus años mozos, con buena posición económica que le permite consumir sin miramientos, habita alrededor o en una metrópoli donde ubica los más costosos centros comerciales, los casinos más selectos, gimnasios y salones, y a la vez puede pertenecer a cualquier orientación sexual.
Al principio la definición insinuaba que la metrosexualidad entrañaba necesariamente la creciente cultura consumista en el varón heterosexual de las grandes urbes, es decir, hombres que hacían suyos comportamientos que eran propios del comportamiento Gay o femenino, teniendo claro que no se trataba de una homosexualidad solapada. Pero encontramos que más tarde esta propensión a seguir el estilo metrosexual ya deja de ser relacionada con la orientación sexual del individuo, y por eso un metrosexual puede identificarse como homosexual, heterosexual o bisexual, pero su mayor empeño y dedicación lo dirige siempre en función del cuidado y arreglo personal, el mantenimiento de su figura y el disfrute del lujo.
¿Veamos por qué se origina la Metrosexualidad?
Desde la década de los 90 florece este nuevo estilo, estudiado por Sociólogos y Psicólogos, que propone un nuevo prototipo del hombre moderno, dejamos atrás la figura del macho, galán temerario y atrevido, ordinario, pelo en pecho y axilas sudorosas para encontrarnos con una nueva figura de complexión atlética pero con su cuerpo afeitado, que se apasiona por el uso de productos para la belleza, preocupado en exceso por su apariencia física y además conocedor del último grito de la moda.
El auge de esta tendencia masculina, así como la asignación de un nombre, explica la necesidad imperiosa de los hombres de romper con esa imagen de virilidad que ha llevado sobre sus hombros y lo ha definido desde siempre en todas las sociedades heteronormativas, logrando ahora alcanzar la libertad para exteriorizar su parte femenina sin el temor a ser encasillado y señalado.
Al metrosexual le apasiona el cuidado de su piel
Realmente la Metrosexualidad como patrón que implica ciertas modificaciones en el aspecto físico y la preocupación por la estética tuvo su incipiente comienzo por los años 50 del pasado siglo, cuando la revolución sexual acarreó la instauración de nuevas ideas que influyeron en la vida erótica y sexual de la sociedad.
Identifiquemos algunas características de los Metrosexuales
-Son consumidores excesivos de productos de belleza, ropa costosa y otros abalorios.
-Tienen la tendencia a estar siempre a la moda.
-Se expresa siempre como un hombre culto, es elegante y educado.
-Mantiene un excesivo cuidado a su aspecto físico, hidrata su piel, disfruta de masajes, su cabello es tratado y teñido por profesionales, se esmera por el ejercicio y una sana alimentación.
-Solo consume licor en casos especiales y es catador de buenos vinos.
-El Metrosexual disfruta de que su imagen sea admirada.
Para mayor información les invito a ver el siguiente vídeo sobre la Metrosexualidad.